La profesora de inglés enseñó a los estudiantes vocabulario y gramática básica. También les dio ejercicios de escritura y lectura para practicar lo aprendido. Los alumnos prestaron atención y participaron activamente en la clase.
La profesora les asignó tareas para completar en casa y les pidió que estudiaran para el examen que tendrían al final de la semana. Los estudiantes se esforzaron por cumplir con todas las actividades y demostrar sus habilidades en el idioma.
Al final de la clase, la profesora les recordó la importancia de practicar el inglés fuera del aula. Les recomendó ver películas en inglés, leer libros y escuchar música en el idioma para mejorar su fluidez y comprensión. Los estudiantes agradecieron sus consejos y se comprometieron a seguir practicando.
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