La policía ha confirmado la muerte de un niño de 4 años tras sufrir un paro cardíaco al caer desde la ventana de su casa mientras sus padres estaban fuera.
La madre había bajado a darle agua al padre que estaba en la calle haciendo unos recados. Sus propios padres lo llevaron al hospital, pero los médicos no pudieron hacer nada para salvarle la vida.
El 112 recibió la llamada poco antes de las 14.30 pero no acudieron porque ya habían llevado al bebé al hospital.
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