Hoy en Parla hoy queremos hacer eco del día del Alzheimer una enfermedad por desgracia muy extendida entre nuestros mayores por ello os queremos mostrar en el día del Alzheimer la gran iniciativa que han tenido nuestro amigos de AFA Parla un centro de día terapéutico especializado en la atención de personas afectadas por la enfermedad de Alzheimer, Parkinson, Ictus, otras enfermedades neurodegenerativas y a sus familiares.
¿Qué es La belleza del deterioro?
La belleza del deterioro es una exposición fotográfica que pretende establecer un símil entre el deterioro cognitivo de una persona y el deterioro material de una fotografía, con el
objetivo de hacer entender al público cómo funcionan este tipo de enfermedades. No solo a
un nivel patológico sino también a un nivel social.
Cuando hablamos de deterioro siempre existe una connotación negativa. Que algo se
deteriore significa que ha sufrido un cambio que supone pasar de un estado primario mejor
a un nuevo estado donde sus condiciones han empeorado notablemente.
Las preguntas básicas de esta exposición son: ¿Podemos encontrar un punto de vista donde ese deterioro tenga una connotación distinta? ¿Existe belleza en ese proceso de deterioro?
Este proyecto ha sido creado por Afa Parla en colaboración con Fundación Montemadrid y
CaixaBank con motivo del Día Mundial del Alzheimer. Su inauguración tendrá lugar el 21
de septiembre en la sala de exposiciones «Miguel Serrano» de la Casa de la Cultura de Parla a las 19:00 horas.
La peculiar transformación que han sufrido estas fotos
La esencia de algo o alguien es el conjunto de características que lo definen. La esencia de
algún modo es el alma. En algunas culturas existe la superstición de que al realizar una
fotografía a una persona capturas su alma, como si de alguna forma mágica su esencia se
pudiese transferir a la imagen. Curiosamente, las fotografías tampoco son eternas e
inmutables. Las fotografías también pueden deteriorarse, como las personas.
Uno de los motivos más frecuentes del deterioro de una fotografía impresa es el pececillo de plata. Se trata de un insecto muy común en los hogares, lo podemos encontrar en grietas o hendiduras de las paredes, sobre todo en lugares donde existe humedad.
Estos insectos se nutren del papel que contienen las fotografías. Es por este motivo que, a
veces, cuando rebuscamos entre nuestras fotos antiguas podemos apreciar cómo tienen a su alrededor mordisquitos.
Para poder reflejar el daño que causan estas enfermedades de forma material, las fotografías (realizadas todas en película de blanco y negro analógica de 35mm) han sido sometidas a un curioso proceso de transformación en el que pececillos de plata se han alimentado de ellas.
Una exposición interactiva
Por último, esta exposición cuenta con su propia guía, en texto y en audio, accesible para
cualquier persona. El único requisito para acceder a ella es disponer de un teléfono móvil
con una cámara para escanear los códigos QR que dan acceso a los audios y textos.
Esto puede hacerse realidad gracias a la app izi.travel, esta aplicación ha sido utilizada en
grandes exposiciones como la de “Banksy. The Art of Protest” y tiene en su catálogo cerca de 15.000 audioguías.
