El fin de semana pasado, cuatro jugadores del CD Olímpico de Parla, de entre 14 y 15 años, agredieron a un árbitro menor después de perder contra el Arancetano de Aranjuez en el complejo deportivo Alfredo di Stéfano de Parla (Madrid).
Según el acta, los futbolistas entraron a la cabina del árbitro y comenzaron a regañarlo con agresiones verbales y físicas.
Ante esta despreciable situación, la Comisión de Competición y Disciplina de la Real Federación Madrileña de Fútbol (RFFM) ha tomado medidas al respecto.
Por lo tanto, se impondrán «sanciones ejemplares» por las conductas violentas y agresiones sufridas por el árbitro del partido y el menor.
El principal agresor recibirá una suspensión de 151 partidos por «desacato, amenazas y coacciones, conducta violenta y agresión al árbitro».
Otro jugador no podrá disputar 71 partidos por «desacato, amenazas y coacciones al árbitro y conducta violenta».
Uno recibirá una pena de 13 partidos «por desacato al árbitro y agresión a un contrario» y los últimos ocho por «agresión a un contrario», y ocho a un quinto jugador «por desacato al árbitro».
Además de eso, el club fue excluido de la Primera Cadete y su presidente, que ejercía como delegado, fue desactivado durante un año «por una infracción muy grave».
FUENTE