Tercer capítulo de «La Gran Pirámide» en el que seguiremos descubriendo las pirámides de Keops y Micerinos y la orientación de estas construcciones que de nuevo vuelven a dejarnos impresionados a todos
Pues bien, como su nombre indica esta cámara está inacabada y el túnel de 14 m. que no va a ningún sitio, con mucha seguridad iría a enlazar con algún otro túnel de los que hay por debajo del complejo de Guiza, muy posiblemente de alguna de las llamadas mastabas.
O también a otra estancia más cercana con cavidades resonante, como podría ser la llamada tumba de Osiris, un enorme complejo de unos 100 m. de altura que está bajo el pasadizo que conecta la esfinge y la pirámide de Kefren, en el que se han encontrado al menos tres enormes supuestos sarcófagos, que en realidad son una especie de cavidad resonante muy sofisticada y que sería la señal que pondría en funcionamiento esa maravillosa máquina que es en realidad la gran pirámide y todas las pirámides de Egipto.
Estando uno de estos supuestos sarcófagos cubierto por el agua subterránea, pues como ya se ha comentado todos estos lugares que están por todo el mundo están relacionados al agua; o han tenido agua o siguen teniendo agua. Pero ¿Por qué dejarían sin terminar este túnel de 14m. que sale de la cámara inacabada de la gran pirámide después de haber construido esa colosal maravilla pétrea? No debemos olvidar que son seis millones de toneladas, con casi tres millones de bloques de caliza unidos en íntimo contacto y 27.000 losas de revestimiento pulidas con calidad óptica, de 16 toneladas cada una.
Esta cámara inacabada de la gran pirámide sería en realidad la última de una serie, donde las ondas de emisión procedentes de las cavidades resonantes de la llamada tumba de Osiris, o de cualquiera de las mastabas cercanas se reforzarían tras el camino recorrido.
Sí la cámara realmente estuviese acabada, esta sería una cámara de resonancia. Al igual que las llamadas cinco cámaras de descarga que presentan estos mismos abultamientos en el suelo y que también están si terminar de construir.
Las cinco cámaras están cerradas, excepto la pequeña abertura cuadrada de 60 centímetros de lado que está en lo alto de la gran galería y da a la cámara de Dawidson.
Estas cinco cámaras de descarga se podría decir que son como cinco cámaras del caos, puestas una encima de otra, a las que llegaba parte de la señal que saliendo de la gran galería, entraba por la abertura de 60 centímetros de lado, que da a la cámara de Dawidson. Cuyas vibraciones
servirían para reforzar la emisión que excitaría el material activo que son los casi tres millones de bloques de caliza.
La cámara de la reina es sin duda una cámara de resonancia en la que hay indicios de que había un “sarcófago” que sería en realidad una cavidad resonante la cual resonaría a su frecuencia característica, pero no con emisión fotónica.
Rafael Alfonso Alfaro García.
