Llega el tercer capítulo de Abu Simbel, tras el increíble segundo capítulo donde vimos cosas realmente interesantes os traemos de nuevo de la mano de Rafael Alfonso un capítulo cargado de nueva información y datos interesantes.
Y además no solo se limitaron a llegar hasta aquí, sino que hicieron mucho más que eso.
Podemos decir que se trata de distintos asentamientos que llegaron a este planeta y se
asentaron en distintos lugares porque pertenecían a distintas razas: La misma especie,
distintas razas, la misma tecnología. Por tanto el origen de las razas no está en este
planeta, sino que está ahí arriba… Digamos que la enorme comunidad humana a nivel
galáctico o intergaláctico que tiene que haber por ahí arriba es algo increíble.
¡Porque vinieron de las estrellas! Esta civilización vino a este planeta a dejar su A.D.N.,
su civilización y su cultura.
Dejaron su A.D.N., que somos nosotros, pero no dejaron su tecnología ni su enorme
saber. Y se asentaron en distintos lugares porque pertenecían a distintas razas. Luego
está claro que el origen de las razas no está en este planeta, sino que está ahí arriba y por
tanto la enorme comunidad humana a nivel galáctico o intergaláctico que tiene que
haber por ahí arriba es algo increíble.
Entonces a mi me entra la risa, o no sé si la risa o las ganas de llorar y después partirme
de risa cada vez que escucho que hacen un lanzamiento desde Cabo Cañaveral o desde
cualquier otro sitio y dicen que tal vez encuentren vida microbiana en algún sitio. Yo no
sé si partirme de risa, ¡O llorar! Porque resulta que toda la humanidad es de origen
extraterrestre.
Y las pruebas las estamos viendo ahí, están en los muros de esos templos. Vamos a ver:
Estamos viendo que tienen unos determinados rasgos raciales y son personas como
nosotros. Tienen unos determinados rasgos raciales que corresponden en este caso con
los rasgos raciales de Egipto. Esa nación que está alrededor de esos templos y pirámides
tienen los mismos rasgos raciales que las personas que están representadas en los muros
de esos templos.
Esto que puede parecer una cosa muy lógica y muy normal, suponiendo que quien está
representado en esos muros sean Ramses II y Nefertari, si es que alguna vez existieron,
lógicamente los rasgos raciales de la gente de esa nación coincidirían con los de estos
dos personajes.
¡Pero no! Estamos hablando no de RamsesII y Nefertari, sino de los verdaderos
constructores, de aquella civilización que vino a este planeta en una época remota,
concretamente hace 12.500 años, que corresponde aproximadamente con medio ciclo
precesional. De eso es de lo que estamos hablando y las connotaciones que tiene son
muy distintas.
Esos son nuestros antepasados reales. También lo son Ramses II y Nefertari, si es que
alguna vez existieron. Pero nuestros verdaderos antepasados son esos que están aquí
representados. Que llegaron en una época remota, se pusieron a construir en todo el
mundo y no solo eso evidentemente, sino que nos crearon a nosotros, nos crearon a su imagen y semejanza tanto en cuerpo como en alma (un tema que tocaremos más
adelante, donde se aportaran datos interesantes).